EL DIA A DIA, MEJOR CON BUENA GENTE.

EL DIA A DIA, MEJOR CON BUENA GENTE.

Ya se hace difícil la soledad, aún más la del Entrenador Profesional y se multiplica cuando encima la familia se encuentra a más de 11.000 km de distancia.

El día a día se lleva, yo que soy persona de costumbres por la mañana tomo café siempre en el mismo sitio camino del Pabellón.

Me cruzo con algunos jugadores que se dirigen al Gimnasio para la sesión mañanera de musculación, a las 10 entrenamiento en pista con una introducción física variada y específica para cada tipo de jugador, no puede ser igual el de 33 años que el de 17, ni el de 2’10 de altura con el de 1’80, intentamos cuidar todas las variables que podemos controlar, para una mejor preparación individual.

Después de la ducha, el almuerzo en un Restaurante pegado a donde entrenamos, un poco de descanso y a entrenar otra vez, esta es la sesión fuerte en pista, ataque, defensa, contenidos, intensidad, algo más de dos horas de intenso trabajo donde nadie “racanea” nada, la disposición para el esfuerzo es total y desde luego es para estar más que satisfecho.

Al terminar yo cierro el “cuaderno de bitácora” del Equipo, anoto los datos del entrenamiento, los detalles a mejorar y lo que debemos de ir preparando para el día siguiente.

Después de una reconfortante ducha tras hacer un poco de ejercicio físico en el parque que tengo delante del apartamento, o ceno en casa o salgo a “pinchar” algo por ahí.

Entre todas las rutinarias horas del día, está la comunicación con casa, el Skype ha dado una nueva dimensión a estar lejos, aunque lo estén y mucho, para mi es la gran vía de escape hasta mi gente, me reconforta y me da fuerza.

Aunque en la distancia los problemas se magnifican y esa horquilla horaria desde que termina la jornada laboral hasta que llega el momento de ir a descansar es quizá cuando peor se pasa, la soledad se agranda.

Muchos entrenos, muchas horas en el pabellón, viajes, hoteles, desde luego no da para encontrar mucha socialización alrededor de uno, el entorno se cierra en el círculo del Equipo.

La mejor sensación es la del entorno laboral, mis Ayudantes, mis jugadores, los empleados del Club, todos hacen que con el buen ambiente que rodea al grupo sea más fácil trabajar.

Algunos ejemplos ayudan a entender mejor nuestro buen grupo.

Compartimos instalación con un nutrido número de deportistas con discapacidades físicas e intelectuales, no falta nunca el respeto y la complicidad de un saludo, los valores humanos afloran.

Ayer noche, hubo partido del Equipo sub19, varios de sus componentes entrenan habitualmente con los profesionales, cuál fue mi sorpresa que la práctica totalidad de la primera plantilla acudió al encuentro y animaron a los chicos en su victoria.

Esos detalles y los diarios que te encuentras conversando y cambiando impresiones con todos ellos, dicen mucho del nivel humano que manejo, para mi es mucho más fácil trabajar con buena gente, mucho mejor y seguro que en la cuenta de resultados también se verá reflejado.

Un saludo.