CÓLICO, DERROTA, MICHELIN, MÉDICOS, JODER QUE SEMANA LLEVO.
Comenzó el dolor el pasado sábado, remitió, jugamos en Bauru, en el regreso comenzaron otra vez los intensos pinchazos, desde las cinco de la mañana hasta las 13 horas del domingo aguanté como pude, ahí, Ewerton Komatsubara (mi ángel de la guarda, aquí en Mogi), me llevó al Hospital, del que casi salgo corriendo, si no hubiera sido por los dolores, estoy seguro de haberlo hecho.
El lunes en una Clínica especializada, donde las atenciones han sido de primera, confirman mi piedrecita dando guerra, tenemos partido el martes, así que hay que aguantar hasta que pase el juego.
Perdemos el partido con Tijuca, no por anunciarlo, pues aunque estaban abajo, nos han ganado a todos los que estamos ahí luchando por no bajar, tienen experiencia y han esperado su momento, comenzamos bien el partido 12-1, alguno pensó que iba a ser fácil, nada de eso, tras el descanso nos han pasado por encima, ni hemos defendido duro y en ataque nos ha podido la presión de tener que ganar.
Hace dos semanas que hablamos de esto en el staff técnico, por desgracia las peores previsiones se han cumplido, a nuestra falta de calidad física y de experiencia en partidos así, se ha unido el nerviosismo de ver que no ganábamos y de eso han sacado un buen partido nuestros rivales.
Esta bipolaridad nos mata, capaces de lo mejor cuando jugamos sin presión y de no ver el aro ni en los tiros libres cuando de verdad hay que meterlos.
Hace unas semanas tras la derrota con Franca, tense la cuerda con el Equipo, "horario michelin", de mi admirado maestro Manel Comas, resultado después del primer día y ante la falta de capacidades mínimas, acabamos entrenando siete por diversas dolencias en los jugadores......
Ese "horario michelin", que impuso Manel siendo Técnico del Baskonia dando valor a las personas que trabajaban ocho horas para ganar un salario y que luego compraban una entrada para vernos.
Así que instauró que al menos los jugadores trabajaran las mismas horas que nuestros aficionados.
Se trataba de entrenar muy fuerte, de ver vídeos y de estar en el pabellón un horario laboral, evidentemente, nunca se alargaba más de un par de días o tres, pero conseguía que el jugador valorara, lo duro que es trabajar fuera del deporte profesional donde somos unos privilegiados.
Yo no tengo ni el recurso de hacerlo, primero por las consecuencias que trae físicas al Equipo, segundo por que aquí, la entrada es gratuita, por decisión de la Prefeitura (Ayuntamiento) con lo cual no se da demasiado valor al espectáculo que se puede ver y tercero por que la factoria Michelin esta lejos de Mogi.
Bueno, mi piedra sigue ahí, ayer me han hecho de todo en la Clínica, a ver si la expulso y me recupero, fiel a mi cabezoneria, no he faltado a ninguna sesión de trabajo, aunque el dolor me estuviera matando, mis grandes maestros, Comas, Brown, Pesquera, Ary, Coello, no permitirían esa flaqueza, así que nada a trabajar para ganar el siguiente partido, o el siguiente, que podemos hacerlo seguro.
Un saludo.
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