ENTRENADOR SIN FRONTERAS

Hace ya tiempo, que mantengo que los Entrenadores españoles somos más valorados fuera de nuestras fronteras que en nuestro propio país. Sin embargo cuesta que seamos contratados en Equipos importantes extranjeros, lo pude comprobar en el Afrobasket pasado, ahora me congratulo y felicito a Jesús Pérez Ramos, Periodista de El Mundo Deportivo por el excelente artículo que ha publicado hoy su Periódico.

                                                Antananarivo. Madagascar. Afrobasket 2011

EL MUNDO DEPORTIVO.

Entrenador sin fronteras

Jesús Pérez Ramos  (Periodista)

06:00 12/07/12

Quizá nunca nos lo hayamos acabado de creer del todo, pero desde hace ya unos cuantos años el basket español es una referencia mundial. Tengo la impresión de que fuera nos valoran más de lo que lo hacemos nosotros mismos. Seguimos teniendo, quizás por un cierto complejo de inferioridad histórico, ese impulso de creer que cualquier apellido extraño es mejor que uno que acaba en 'ez', pero la realidad es bien distinta. Quizá eso se ve muy claro con los Gasol, Navarro y compañía, es decir, con los jugadores, pero hace ya tiempo que esa misma consideración se tendría que extender a los entrenadores. Ver a Joan Plaza, al que considero un excelente técnico, en el banquillo del Zalgiris es todo un orgullo. El club lituano quizá no tiene mucho dinero, pero lo que sí tiene –y su afición, también, porque en ese país el basket es una religión– es conocimiento de este deporte.

En estos últimos años hemos sido una gran potencia exportadora de técnicos (Sergio Valdeolmillos, Pep Clarós, Roberto Íñiguez, Paco García, Tim Shea, Moncho López, José Ignacio Hernández, Chema Berrocal, Iván Déniz, Natxo Lezcano, Jesús Ramírez y varios más que me dejo seguro en el tintero). Es posible que Plaza, que va a un equipo de Euroliga, se convierta en un pionero y en unos años haya entrenadores españoles en muchos de los banquillos de los principales equipos europeos, de la misma forma que hemos visto eso durante años con técnicos de otras nacionalidades, especialmente balcánicos. Personalmente creo que no estaría nada mal vivir algo así.

Está claro que los nuestros tienen calidad de sobra para hacerlo y que además son extremadamente valorados fuera, así que posiblemente lo único que necesitan es dar ese paso mental que necesita cualquier emigrante para saltar al vacío.

                                Tiempo muerto de Paco García con la Selección de CentroAfrica