TAUGRES VITORIA 93-94.
La triste noticia de la enfermedad de Manel Comas, casi me obliga moralmente a reemprender temporada a temporada mi trayectoria profesional, de la que él tiene mucha culpa, seguro que cuando lo lea, mas de una sonrisa le sacaré y con eso, yo ya seré feliz.
Antes mandar un “recadito”, por mucho que he buscado, ¿alguien me puede contar que pasó el año anterior con Herb Brown y que pidió, para el entreno tras perder en Madrid y justo antes de cesarlo??????
Empezaba una nueva temporada en Vitoria con nuevo Entrenador, Manel Comas, se decía que había sido fichado durante la Copa del Rey de Febrero en Coruña, venía de salvar al Cáceres y pocos sabían lo importante que iba a ser en la historia del Club.
Yo regresaba de mi primera experiencia con Selección Española, quedamos campeones en el preeuropeo de Évora, mientras que otro grupo preparaba el Mundial sub’22 de Castilla-León, donde por cierto, no todo salió bien, fui Ayudante de Aranzana, junto a Pedro Eneriz y Ángel Jareño.
Estando con la Selección renové con el Baskonia, me había casado en Junio y empezaba esta nueva etapa como Ayudante de Comas con mucho respeto, por todo lo que se contaba de Manel.
De pie: Jon Mena (delegado), Nicola, Montaner (fisio), Rivas, Manel Comas, Bannister, Laso, Talaverón, Paco García y Carlos Cazorla.
En el suelo: Castellanos, Perasovic, Rodriguez, JP Cazorla, Gómez.
El primer día de trabajo, nos subimos a un autobús para ir a Biescas, en ese viaje hacia la pretemporada en los pirineos todas los miedos hacia Manel se disiparon, conectamos muy bien y en pocos días me sentía tan a gusto con él, que parecía que llevábamos años trabajando juntos.
Hicimos la mejor pretemporada que yo recuerde en mí carrera, excelente trabajo físico con Oscar Bilbao y aún mejor convivencia, íbamos a jugar Copa de Europa y los objetivos del Club estaban claros, seguir creciendo.
Al Equipo se incorporaba una estrella, Velimir Perasovic, tras debutar en ACB en el Breogán y ser uno de los referentes de la Jugosplastika de Split, “Peras” se convirtió en uno de los jugadores más importantes en la historia del Club.
Laso en una entrada en Vitoria ante el Cholet.
Se unía a Pablo Laso, Ramón Rivas, Marcelo Nicola, Santi Abad en su segunda etapa en Vitoria, aunque se incorporó ya iniciada la temporada, a un americano tan rentable como peculiar Ken “animal” Bannister, un pívot catalán, excelente obrero del Equipo como Rafael Talaverón y un grupo de jóvenes formados en Vitoria.
De Alsásua Ander Txintxurreta, a quién su rodilla no le dejó usar esa mano de seda que tenía, de Gran Canaria, Juan Pedro y Carlos Cazorla, de Alicante, Iñaki Gómez y de Extremadura Pedro Rodríguez.
Con contratos temporales estuvo un buen ala-pívot madrileño, Nacho Castellanos y más tarde y sin llegar a cuajar, llegó otro americano, Anthony Reed que pasó sin destacar en un grupo en el que su fortaleza radicaba en el buen ambiente y en el respeto que reinó entre todos.
Voy a relatar en tres apartados la temporada, el primero en lo referente a la Copa de Europa.
Mate de Bannister por encima de Vargas en la semifinal ante Cholet. Rivas mira.
Nuestro primer rival, fue el Kormend húngaro, sin internet inventado y con las dificultades para encontrar información del rival, me tocó hacer de espía, que ya lo había hecho antes con Herb Brown y marchar a ver jugar a los húngaros, viaje tremendo, yo solo, vía Grass en Austria, coche hasta Kormend, dormir en un orfanato (o algo parecido) y volver eso sí con el informe hecho y hasta un video en VHS del partido que había visto.
La siguiente previa fue contra el Zalguiris, es imposible olvidar el viaje a Lituania, jugamos en otra Ciudad Alitus, al estar en obras el Pabellón de Kaunas, nos alojaron en un Hospital Geriátrico y tétrico, a la vez que helador, del día de partido hay varias anécdotas, que son para contar en una buena sobremesa, la noche en el Hotel al lado del aeropuerto a -16 grados, fue la guinda a una eliminatoria que también ganamos.
Tras arrasar en esa previa a los húngaros, y eliminar al Zalguiris, jugamos liguilla de grupo frente al Tofas Bursa Turco, Croatia Split (antigua Jugoplastika), Olimpia de Lubjiana, Bellinzona Suizo y el Rabotnicki de Sjkope Macedonio.
De esa liguilla muchas cosas se podían contar y otras mejor que no se sepan…..del partido de Split, cuando Manel pierde el partido, obligando a fallar un tiro libre a Talaverón con el consiguiente cabreo de Peras, meterlo nos hubiera llevado a una prorroga y luego se demostró ganado por cinco puntos en Vitoria lo adecuado de esa decisión, el recibimiento a Perasovic y su inquietud por enseñarnos su Ciudad, del viaje a Macedonia, a Eslovenia, a Suiza con la visita de Antonio Díaz-Miguel, Entrenador en Cantú de aquellas, a Bursa con transbordo de avión, autobús y hasta barco para llegar a la Ciudad turca.
Trás ganar la semifinal al Cholet.
Podría dedicar varias horas a contar historias de esos viajes, siempre vía Frankfurt, en medio de la guerra de los Balcanes donde en Split o Skojpe fuimos testigos de la realidad dl conflicto, del Directivo Sanchón, de los Periodistas que viajaban con nosotros, Lecuona, Muntion, etc…..
La cosa es que terminamos segundos tras el Olimpia esloveno y nos cruzamos en semifinales con el Cholet francés, las fechas 17, 22 y 24 de febrero de 1.994, jugaban, Rigaudeau, José Vargas el dominicano, Mike Jones que jugó en el Barça como principales referentes.
Ganamos el primer partido en Vitoria 81-67, perdimos en Francia el segundo 103-90 y ganamos el desempate 83-90, después de que Manel apretase la cuerda al Equipo con una sesión de video de las que aún te tiemblan las piernas de la tensión vivida.
El regreso a Vitoria tras ganar y el recibimiento, absolutamente inesperado, aún lo tengo fresco en mi mente, ahora los jóvenes, acostumbrados a ir a la Plaza de la Virgen Blanca con los Títulos que ahora gana el Baskonia, no entenderán mucho este sentimiento, los que lo vivimos es difícil de olvidar.
Abad, Rivas, Bannister, Rodriguez, Talaverón.
Gómez, Txintxurreta, Laso, Cazorla, Perasovic.
La Ciudad vivió para esa Final contra el Olimpia de Lubjiana de Zmago Sagadín, se jugó en Laussana y hasta allí viajaron más de tres mil personas principalmente en autobuses (22 horas de viaje), entre ellas mi mujer Ana.
La llegada al pabellón fue tremenda, arropados por la afición, pero sí hay una imagen en mi vida grabada, es al salir a la pista y ver un fondo lleno de banderas, camisetas y gente a muerte con su Equipo, la emoción aún me embarga, cuando lo recuerdo al escribirlo.
Perdimos la Final, un 15 de Marzo, el resultado, 91-81, con 43-41 al descanso, con todo estudiado, todo previsto, su base Hauptman 27 puntos entraba dentro de la lógica, Gorenc, Tusek, Kraljevic, Nosov, controlados, pero apareció Roman Horvat para hacer el partido de su vida, 36 puntos con ¡¡¡¡¡¡¡ 10 de 15 triples !!!!!!! i n c r e i b l e.
Era la segunda Final perdida en apenas unos días, la otra, la de la Copa del rey de Sevilla la contaré en la próxima entrega y también los Play-Off de la Liga.
El Equipo se había colado entre los grandes y mucha culpa de ello la tenía el Entrenador, Manel Comas, su experiencia, cabezonería y máxima exigencia habían dotado al grupo de un extra importante, lo siguiente era… ganar.
Continuará.
