GRACIAS LUGO, GRACIAS BREOGÁN.
Según nos acercábamos a Lugo nos fuimos callando en el
coche, a los tres, Clara, Ana y yo nos embargaba una emoción de volver a la que
fue nuestra casa durante ocho temporadas, sabíamos que nos esperaba un fin de
semana plagado de recuerdos y de sensaciones fantásticas pero no quedamos
cortos.
Por los cinco minutos que he pasado en el centro de la
pista del Pazo dos deportes lucense merece la pena una carrera de 32 años en el
baloncesto profesional, recoger tanto cariño, aplausos y gestos de afecto hacia
mi familia y mi persona, es posiblemente el mejor momento de mi vida deportiva
y uno de los más importantes también de mi vida personal.
Es imposible enumerar a todas las personas que se nos
han acercado para saludarnos, recordarnos momentos pasados o simplemente
expresar su cariño y afecto hacia nosotros, al llegar hemos comido con nuestros
amigos Clara, Fernando y Laura, como ha nosotros que nos faltaba Celia a ellos
les faltaba Candela que estudia en León.
Después del partido hemos cenado con Fran de Andrés y
su mujer Tere, fue como siempre digo mi mejor fichaje para el Breogán, llego
como Delegado de equipo desde su Gijón natal y ahora lo tengo como uno de mis
buenos amigos.
Todo lo pasado entre medias solo tiene una palabra para
adjetivarlo que es agradecimiento, a Suso Lázare como Presidente del Club
Baloncesto Breogán por acordarse de mí, extensible a toda su Junta Directiva y
trabajadores del Club, a los periodistas por todo lo que han escrito y hablado,
aficionados y gente de la Ciudad de Lugo que se quisieron sumar a este homenaje
que recibí el sábado.
Agradecimiento a todos los que durante esas ocho
temporadas han trabajado conmigo, a Miguel Giao, Belén, Lisardo, Sese, etc,
etc, etc,….
Lástima que no recibiera ni una llamada siquiera del
Presidente que me fichó en 1.997, pues sin él nada de esto hubiera pasado casi
veinte años después, una pena.
Artículo en El Progreso de Lugo. 16 Enero 2017.
Orgulloso de saber la alegría y emoción que tenían mi
mujer Ana y mis hijas, Clara presente en el Pazo y Celia desde la distancia con
Estados Unidos, sin su apoyo y compresión durante todos estos años no hubiera
sido posible hacer la carrera que he hecho.
Ganó el Breogán para que fuera un día perfecto, apuesto
por ellos para llegar líderes al final de esta igualadísima Liga LEB Oro, así
que la próxima en Lugo no será para ver playoff y si, muy posiblemente para
acudir al Arde Lucus como ya hemos hecho en otras ocasiones.
Ese reconocimiento basado en números, mas temporadas
como Técnico, más partidos dirigidos y más victorias conseguidas es el resultado
del trabajo de muchos profesionales que ayudaron a que todo eso se fuera
consumando y a los que siempre tendré en mi recuerdo, pues ese homenaje también
es para ellos.
Gracias Breogán y gracias Lugo, ese sábado 14 de enero
ya está grabado en mi vida, cinco minutos para siempre.
Un saludo.