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jueves, 14 de enero de 2016

CAMBIO DE ENTRENADOR.

CAMBIO DE ENTRENADOR.

No es extraño que durante una temporada deportiva se produzcan cambios de Entrenador, en contra de la opinión generalizada no son solo los resultados los que dictaminan el relevo en un banquillo, aunque sean estos los que normalmente generan más turbulencias.

En este mundo laboral nuestro debemos de tener muy claro que para que un Entrenador tenga trabajo otro ha dejado de tenerlo y que sin estar escrita ninguna regla deberíamos de respetar al máximo todo lo realizado por nuestro predecesor, por desgracia no siempre ocurre y la ética caída, encumbra al entrante arrastrando por el suelo al saliente.

Si analizamos alguno de los relevos que se han producido en los últimos meses en nuestra ACB, vemos como en Tenerife, el Técnico del CB Canarias, mi amigo Alejandro Martínez dejo a primeros de noviembre pasado el banquillo por un asunto personal médico, pocas semanas después en Fuenlabrada otro motivo como es encontrar una salida a un Club con mayor “solera” e historial hizo que Zan Tabak dejara el sur de Madrid por la oferta del Maccabi en Tel Aviv.


En ambos casos los recambios han sido diferentes, en las islas contrataron a un Técnico de reconocida trayectoria y los fuenlabreños dieron las riendas a un debutante en la Liga.

Mi propio caso en Mogi das Cruzes, donde voluntariamente pedí mi rescisión de contrato para volver a casa, son situaciones que no se dan habitualmente.

Lo lógico cuando se cambia de Entrenador es que sea debido a los malos resultados deportivos, también aquí en España San Sebastián y Zaragoza viendo la trayectoria e inercias de sus Equipos optaron por sustituir a sus Técnicos, como Limoges en Francia o Zalguiris en Lituania, o los propios Brooklyn Nets en la NBA.

En el futbol, estos cambios están a la orden del día y son muchos pero muchos, los relevos que se producen en los banquillos no solo de nuestro País, es como si en cuanto se tuerce la trayectoria de resultados haya que cambiar o lo tristemente escuchado “buscar un revulsivo”.

Las Leyes deportivas, “dicen” que el Entrenador que es despedido de su puesto de trabajo debería de recibir el salario completo que marca el contrato firmado entre las dos partes, pocas veces se cumple este dictado y muchas en las que hay que llegar a un mal acuerdo antes que iniciar un buen pleito que se demore en el tiempo y aun mas en el pago.

Siempre he pensado que la categoría de un Club se ve cuando te despide, no cuando te contrata, que todo es de color de rosa.

Ahora que es un momento crítico de cualquier temporada intento reflexionar sobre quién debería de pagar lo que supone para una entidad el cambio de un Técnico, (al que hay que pagar) y contratar a uno nuevo (al que también, lógicamente se le debe de retribuir).

Es muy triste escuchar las famosas frase hechas que se dicen cuando un nuevo inquilino llega a un banquillo, “los jugadores han recuperado la alegría”, “ahora si entrenamos bien”, “el cambio era necesario” y muchas otras más que siguen a la desgraciada cita de “a Entrenador nuevo, victoria segura”, que siempre se recuerda cuando se produce y se olvida cuando se sigue perdiendo.

Cuando un cambio de Entrenador es debido a los resultados, deberían de pagarlo TODOS, por supuesto el primer damnificado es el propio Técnico saliente, con su dinero si…, cuando lo cobra, pero se ve en el paro y con un cese en su hoja de servicio.

Lo paga el Club, que tiene que asumir su error en la contratación de una figura tan importante como es la de su Entrenador y como escribía antes asumir los pagos del saliente y del entrante con el consiguiente desvío económico en los presupuestos anuales.

Pero… y los jugadores ???, los malos resultados llegan producto de la suma de muchas situaciones, calidad de los mismos, preparación, entrenamiento y la propia actitud más aptitud mezclada en la coctelera con la manida química de grupo, cuando no se gana varios son los factores de análisis.

Con el cambio, todo cambia…se corre más y las excusas dan paso al esfuerzo, al sacrifico, a la atención y a un talante desconocido apenas unos días antes y solo ha sido debido por un relevo del que manda??? Me huele mal…

Cuando ves la salida de Rafa Benítez del Real Madrid y escuchas y lees tantas y tantas absurdas excusas siempre pienso “ y si alguna vez un Club hiciera pagar a sus jugadores el coste de un cambio de Técnico”, que ocurriría ???, dejando de lado sindicatos, prensa y aficionados que pondrían el grito en el cielo quede claro.

Estoy seguro, de que si repercutiese el cambio de un “Coach o Míster” en el bolsillo de aquellos que ocasionan su salida, veríamos muchos menos despidos.

Es solo una reflexión, después de treinta años como Entrenador Profesional y haber vivido y pasado por muchas de las situaciones aquí citadas, me permito la licencia de escribir mis pensamientos, como siempre a algunos les gustará y a otros no.

A mi sí, que es lo que me importa.

Un saludo.


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